martes, 1 de enero de 2013


RUTA CONSOLACIÓN

LUGAR DE INICIO: Plaza de la Constitución (Ayuntamiento).
FINALIZACIÓN: Domadero
DISTANCIA: 9 kms.
DIFICULTAD: media.

Ruta diseñada por: Claudio Rodríguez Rodríguez.

RECORRIDO

IDA: 1.- Plaza de la Constitución, 2.- Corredera, 3.- Lope de Vega, 4.- Domadero, cruzar la Carretera de Zújar, 5.- camino de Altobajas, 6.- Manzanera, 7.- Charco del Carril, 8.- Cruzar la carretera de Consolación, 9.- Camino de Sevilla, 10.- Cruzar la carretera de Consolación, 11.- Camino de Consolación, 12.- Ermita de Consolación.

VUELTA: 13.- Camino de la Trocha de Consolación, 14.- Cerro de los Abades, 15.-Paso del Arroyo de la Dehesa, 16.- Cantera de Ángel Pérez, 17.- Manzanera,  5.-Camino de Altobajas,  cruzar la carretera de Zújar, 4.- Domadero.

RECORRIDO CIRCULAR

Discurre por terreno llano de composición granítica con ligeras ondulaciones. Formó parte de la Dehesa de Barbellido, mejor Valbellido, que perteneció al Concejo de Belalcázar y fue enajenada por ley de Desamortización.
Dedicado al cultivo de cereales, se ven rastrojos y barbechos, algunas viñas, melonares y pequeñas huertas; quedan algunos cercados de piedra.
La zona está salpicada de arbolado, principalmente, olivos, almendros y eucaliptos.
Se ven algunos chales, vaquerizas y viejas casas de cortijos construidas con paredes de granito.
Tanto a la ida como a la vuelta se cruza, por vados diferentes, el Arroyo de la Dehesa, seco en estas fechas pero de abundante corriente en otras. En su cauce afloran enormes lastras de granito; en sus márgenes y cercanías quedan antiguas canteras de granito abandonadas hace pocos años.
El antiguo camino de Sevilla, por el que se transportaba el azogue desde Almadén a Sevilla, conserva, en algunas partes, su antigua anchura limitada con paredes de piedra. Junto a una de estas paredes se puede observar, todavía, un pequeño tramo de la calzada romana descrita por don Ángel Delgado.
El cerro de los Abades recibe su nombre de una aldea medieval que allí hubo.
La ermita de Consolación se construyó a finales del siglo XIII, a raíz de la repoblación cristiana de Belalcázar, por entonces Gahet. Fue iglesia de la antigua aldea de Coslada y se reconstruyó después de 1483. A esta reconstrucción se deben, tanto la arquería izquierda de su nave central, cuyas columnas plintos y basas son iguales que las del patio de la portería de Santa Clara de la Columna, como las pinturas góticas de la capilla de la Purísima que escenifican el acto de la purificación o presentación de María en el templo después del nacimiento de su hijo.